Mujeres pioneras en el mundo del deporte olímpico

Estamos en plenos Juegos Olímpicos de Invierno, que este año 2014, como sabéis, se celebran en la localidad rusa de Sochi. Hoy en día ya nadie se plantea (bueno, nadie en su sano juicio y que viva en el siglo XXI) la participación de las mujeres en el mundo del deporte y en las competiciones deportivas de todo tipo, incluidos los Juegos Olímpicos, en igualdad de condiciones que los hombres. Pero esto no siempre ha sido así y las mujeres hemos tenido que demostrar, como en otras muchas áreas de la vida, que somos tan aptas como los hombres y que sin duda, tenemos derecho a participar en actividades deportivas de primer nivel.

Coincidiendo con este momento de Juegos Olímpicos, la empresa Bwin está realizando un homenaje a las mujeres a su participación en el mundo del deporte y me he querido unir a esta iniciativa echando la vista atrás y destacando la figura de varias mujeres que hicieron historia en el mundo del deporte olímpico por ser pioneras valientes y atrevidas.

Empezamos con Charlotte Cooper, que fue la primera mujer que ganó una medalla olímpica en la historia de los Juegos Olímpicos. ¿A que su nombre no os suena de nada? Pues bien, se trataba de una tenista inglesa nacida en 1870 quien desde muy jovencita destacó en este deporte de raqueta, que por aquel entonces era propio de la alta sociedad. Ganó varios títulos en Wimbledon y en 1900 acudió a los Juegos Olímpicos de París representando a su país, Gran Bretaña y consiguiendo el primer título para una mujer. Cabe destacar que los juegos de 1900 fueron los primeros con participación femenina así que tiene su mérito!

El segundo nombre que quiero destacar es el de Alice Coachman. Se trata de la primera mujer negra que ganó una medalla de oro olímpica. Y es que ya sabemos que las mujeres han sido discriminadas durante muchas décadas pero desde luego, las personas de raza negra lo han sido también, así que su mérito es doble, al igual que su lucha! Su éxito tuvo lugar en los Juegos Olímpicos de Londres de 1948 y en la categoría de salto de altura. Coachman pertenecía a una familia pobre del estado sureño de Georgia de Estados Unidos, donde no nos olvidemos que en aquella época, las personas negras no tenían los mismos derechos civiles que los blancos en Estados Unidos, puesto que no podían ir a la universidad, votar o usar los mismos lavabos que los blancos!

Y por último, un tercer nombre que quizá habéis leído estos días en la prensa por ser de rabiosa actualidad. Se trata de la patinadora holandesa Ireen Wust, quien acaba de ganar una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Sochi, erigiéndose como la primera deportista abiertamente homosexual en ganar una medalla en estos Juegos que tanta polémica han generado por culpa del gobierno ruso que lleva meses acosando a los homosexuales y que ha declarado abiertamente que no “son bienvenidos” en estos Juegos y en su país en general. Aunque Ireen Wust no ha querido hacer una bandera de su condición sexual, su medalla es una bofetada en la cara de los homófobos rusos y de todo el mundo!

Pues hasta aquí el pequeño homenaje a las mujeres deportistas y a las mujeres que cambian la historia, incluso sin darse cuenta!

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