Los Superalimentos que no son tan "super" -

Hace tiempo que quería hablar en el blog de los superalimentos, un concepto que hoy en día está muy de moda y que todas escuchamos a todas horas en referencia a algunos ingredientes que de pronto parece que son casi milagrosos. No tengo nada en contra de los alimentos saludables, ¡ni mucho menos! pero me parece algo ridícula la pasión descontrolada por algunos ingredientes a los que de pronto parece que se les atribuyen propiedades curativas sin las cuales no sé como hemos podido sobrevivir a lo largo de la historia…

¿No os parece ridícula la gente que fuma 2 paquetes de cigarrillos diarios pero presume de vida sana por comer ensaladas de quinoa y espolvorear chía en su yogur? A mi sí. Y me da mucha rabia. Por eso quería escribir sobre este tema ayudándome por supuesto de información de personas expertas como el blog Mi dieta cojea de Aitor Sánchez.

Falsos mitos sobre los superalimentos

Las propiedades nutricionales de los superalimentos no los convierten en milagrosos. Incorporar estos alimentos ayuda a mejorar nuestro estado de salud o a prevenir problemas pero no curan una dolencia ni son medicamentos.
No hay que olvidar la importancia de una dieta variada y sana: hay que mantener costumbres sanas e incorporar alimentos saludables y frescos a diario. Por ejemplo, comer un puñado de arándanos o una cucharada de chía no son mejores que comer verduras y frutas a diario, así que no vale hincharse a comida precocinada y pretender compensarlo comiendo tostadas con aguacate. ¿se entiende, verdad?
Los alimentos frescos de temporada también son superalimentos: los alimentos naturales, de proximidad y de temporada están llenos de propiedades positivas: minerales, vitaminas, grasas buenas…. mientras que un ingrediente que lleva semanas en una cámara y que fue arrancado del árbol hace ya meses en la otra punta del mundo ha perdido gran parte de sus nutrientes. Por ejemplo: sabemos que el aguacate es bueno y saludable, sí, pero un tomate o un puñado de espinacas de cultivo ecológico de tu propia localidad no tiene nada que envidiarle a un aguacate que ha sido cultivado en México y traído a Europa.

La dieta mediterránea está llena de superalimentos

Así es, los ingredientes comunes en nuestra mesa y en nuestra nevera también pueden ser considerados superalimentos. De hecho lo son. Repasamos algunos de los superalimentos comunes que seguro que tienes en la cocina ahora mismo…

Aceite de oliva: aporta grasas de las buenas, de las que nos ayudan a disminuir el colesterol malo y a mejorar nuestra salud cardiovascular. Tiene también propiedades antioxidantes y estudios científicos han demostrado su contribución a la disminución del desarrollo de cáncer de mama en mujeres. ¿Engorda? Pues en grandes cantidades sí, ciertamente, lo mejor es no pasarnos de 2 cucharadas soperas al día. Ahh y ¡elígelo virgen extra, que es el aceite de oliva de mayor calidad!

Legumbres: ¡que se lo pregunten a nuestras abuelas! en sus mesas las legumbres estaban mucho mas presentes que en las mesas actuales… y es que es un ingrediente muy común entre nosotros y lleno de propiedades. Las lentejas, los garbanzos y las alubias tienen proteínas vegetales, hierro, magnesio, potasio, fósforo y vitaminas del grupo B. No aportan colesterol y tienen un bajo contenido en grasa. Lo que engorda de las lentejas son las carnes grasas añadidas, así que es el momento de explorar nuevas recetas: ensaladas frías de alubias, hummus (pasta de garbanzos), byessar (pasta de habas al estilo marroquí), lentejas con verduras o garbanzos salteados son opciones con poca grasa que deberíamos incorporar en la dieta al menos 2 ó 3 veces por semana.

Naranjas: al igal que otros cítricos como el limón, la mandarina o el pomelo, son una gran fuente de vitamina C que ayuda a fortalecer al cuerpo para que los resfriados sean mas leves y cortos. También tienen vitamina A que protege el cuerpo de las enfermedades degenerativas y tiene grandes propiedades antioxidantes. ¡El consumo diario de naranjas y otros cítricos es más que aconsejable!

Nueces: este fruto seco es probablemente, el rey de todos ellos. Las nueces son ricas en Omega3 (ácidos grasos buenos y beneficios para el cuerpo), aportan vitamina E y fibra y nos ayudan a controlar el colesterol y las enfermedades cardiovasculares. En grandes cantidades engordan, sí, es cierto, pero tomar cada día un puñadito de nueces (esto son 10 como máximo) nos ayudará a estar más sanos.

Hojas verdes: las verduras de hojas verdes (acelgas, espinacas, rúcula, brotes verdes y tiernos de lechuga variada) aportan mucha clorofila, esencial para depurar el organismo. Son ricas en aminoácidos, ácidos grasos omega y fibra que ayuda al sistema digestivo. Contienen poquísimas calorías por lo que son perfectas para cualquier tipo de dieta, incluso si queremos adelgazar. Consumirlas crudas es muy recomendable, en forma de ensalada o como guarnición de cualquier plato.

Una dieta saludable y variada, la clave del éxito

Con todo esto podemos concluir que los considerados superalimentos según estas denominaciones de moda están muy bien, sí, y podemos incorporarlos a nuestra dieta para aprovecharon de sus beneficios. Pero no debemos olvidarnos de otros ingredientes que no por ser mas comunes contienen menos propiedades beneficiosas.

Los estudios médicos realmente han indicado que lo que es perjudicial para la salud es el exceso de grasas saturadas, azúcares y harinas refinadas y otros ingredientes poco saludables pero no los estudios médicos o científicos no indican que una dieta sea más sana “solamente” por incluir superalimentos. Por ejemplo, el Instituto Carlos III de Madrid realizó un estudio entre pacientes con riesgo cardiovascular y probó que una dieta rica en alimentos de la dieta mediterránea como las frutas, las verduras, las legumbres o el pescado a la vez que baja en refrescos azucarados, carnes grasas y dulces reducía hasta un 30% la probabilidad de infartos.

Dicho todo esto, quiero insistir en que este artículo no es para cargarme los llamados superalimentos sino simplemente hacer una reflexión sobre las modas en la alimentación y en la importancia de mantener una dieta saludable y variada donde,por supuesto también pueden tener lugar estos alimentos tan de moda.